Diarios de viaje

Diario de viaje MIA-NYC, día 1: Orlando

Written by Preembarque.com

El primer día de un viaje así tiene la particularidad de poder ser simultáneamente, el mejor y el peor.

Toda la expectativa se entremezcla con el stress del viaje, el cansancio de dormir poco en el avión y la ansiedad de querer abarcar todo.

Llegamos a Miami a las 5AM. El sistema que implementó migraciones recientemente es por demás eficiente. Instalaron unos tótems que te escanean la visa, para luego poder encarar al empleado, de apellido Gómez-Hernández. En menos de 20 minutos ya estábamos en el Mover que te lleva al Car Rental. Y para nuestra sorpresa, ahí tampoco había nadie! En síntesis, en menos de una hora ya estábamos ante el primer gran momento de este tipo de viajes: elegir qué auto te llevas.

Finalmente, elogimos el Toyota Rav4, en Budget

De ahí, primera escala: USABox, para retirar los paquetes que habíamos enviado. Otro gran momento, cuando el empleado, con el característico acento que mezcla cubano con inglés, nos acerca las cajas.

Retirando los paquetes en USA Box

Listo: arriba del Toyota nuevamente, para encarar la Turnpike rumbo a Orlando, sin dejar de hacer la parada reglamentaria en una de las Plazas.

Antes del checkin en el hotel, otra escala importante: Ross. Y ya sí, un paso por la habitación para ducharse y recargar baterías para la recta final del primer y eterno día. Un poco de shopping en el Buena Vista Lake Factory y a pasear por Disney Springs. Recorrimos el lugar de punta a punta, repleto de gente; verificamos el cierre de Disney Quest; pedimos unos dipper shakes en Planet Hollywood Observatory y confirmamos que Disney es la diabólica maquinaria de la felicidad.

Disney Springs, Orlando

El hotel

Paramos en el Seasons Florida Resort, por la 192 cerca de Old Town. 52 dólares la noche, en una habitación con dos camas dobles en la que cómodamente puede parar una familia de dos adultos y dos chicos. Un hotel más que aceptable, limpio y amplio. Nos hizo acordar mucho a las habitaciones del All Star de Disney. Sin magia, por supuesto, pero a menos de la mitad de precio. Lo único malo: el desayuno tiene lo mínimo indispensable. Pero si vas a estar en los parques o en los outlets todo el día, ni lo dudes.