Guías de viaje

Cómo llegar de JFK al centro

Written by Preembarque.com

El aeropuerto más grande de Nueva York es el JFK, y luego de decidir cómo volar hasta allá y dónde alojarnos la siguiente duda que surge inmediatamente es… y cómo llegamos desde el aeropuerto hasta el hotel?

Como corresponde a una gran ciudad, hay varias opciones.Más rápidas, más baratas o más cómodas, tenés para elegir. Pero todas son seguras.

Viajar en taxi

Desde JFK hasta cualquier punto de Manhattan el taxi tiene una tarifa plana de 52 dólares, a los cuales hay que sumarle peajes y propina. El presupuesto, entonces, es de aproximadamente 75 dólares. Suele haber bastante cola de gente esperando, pero es bastante fluido. Los autos son bastante amplios, con lugar para tres o cuatro pasajeros (a veces te permiten viajar en el asiento del acompañante) y buen espacio para valijas. A cargo de organizar la fila, sobretodo en horas pico, hay un agente de la TLC, el organismo municipal que regula los taxis, y que va a preguntarte a dónde vas, para registrarlo en un dispositivo electrónico que además te da el ticket. Muy ordenado y dinámico. Se puede pagar directamente con tarjeta cuando llegás a destino, siempre agregándole la propina. El viaje hasta Manhattan no es muy atractivo, sobretodo la primera parte, porque las autopistas pasan por zonas bastante grises.

Viajar en Uber

Debido a la tarifa plana que ofrecen los taxis tradicionales, Uber no resulta negocio desde JFK, y habrá que estar atentos al tráfico, a la tarifa dinámica (de acuerdo a la demanda) y, principalmente, a la zona donde quede el hotel. Un viaje desde el aeropuerto hasta Times Square te puede costar unos 75 dólares con UberX y no menos de 100 dólares con UberXL (autos más grandes de hasta 6 pasajeros o para muchas valijas). Podés calcular la tarifa con el estimador online, pero recordá que siempre es aproximado.

Viajar en transporte público

Tren y subte es la opción más barata. Te saldrá apenas 7,75 y si bien la combinación es simple, el viaje tiene algunas complicaciones. No vamos a mencionar la cantidad de gente y las subidas y bajadas con las valijas por las escaleras de las estaciones porque es algo evidente.

En JFK hay que buscar los carteles del AirTrain y revisar en el mapa la combinación que más convenga para tu hotel. Para llegar a la zona de Times Square, por ejemplo, hay que bajarse en Jamaica Station y ahí tomar el E, la línea azul. Ese AirTrain no se paga a la entrada, sino a la salida del andén, en unas expendedoras automáticas. Ese ticket no sirve para el subte, por lo que unos metros más adelante vas a tener que comprar el pasaje de metro en otras máquinas. Una sugerencia que no suele fallar es la Metrocard ilimitada por 7 días, que te cuesta 32 dólares por persona pero, como su nombre lo dice, la podés usar todas las veces que quieras durante ese tiempo.

Viajar en micro

También está el NYC Airporter, que te cuesta 19 dólares (35 si comprás ida y vuelta). Es un bus grande y cómodo que funciona desde las 6 de la madrugada hasta la medianoche y tarda una hora y media, de promedio. Tiene tres paradas ya estipuladas, que son Grand Central Terminal (41 y Lexington), Penn Station y la Port Authority Bus Terminal (42 entre las avenidas 8 y 9).

Además, si te vas a hospedar en algún hotel de Times Square o de la zona Midtown, te ofrecen un servicio gratuito de vans que te lleva hasta la puerta. Para viajar desde Manhattan hacia el aeropuerto no te pasan a buscar por el hotel.

Viajar en combis compartidas

Una opción que resulta más barata que el taxi y más cómoda que el subte es contratar el viaje con una camioneta en la que compartís el viaje con otros turistas. Hay varias empresas, pero por ejemplo SuperShuttle cobra 25 dólares por llevarte a cualquier hotel de Manhattan. Te incluye una valija por persona y probablemente te de una vuelta por la ciudad repartiendo a otros pasajeros antes de que llegue a tu destino. Y si son una familia grande o viajaste con varios amigos podés optar por el servicio sin paradas, que te sale 125 dólares por hasta 10 pasajeros.

 

La recomendación es llegar con esta decisión ya tomada de antemano, porque entre el cansancio del viaje, el stress de llegar y cargado de valijas, no es buena idea improvisar.